Anteayer recibí 5 flamantes discos en mi casa, cortesía de una de las páginas en las que he hecho mis pinitos como crítico musical amateur. Sobre los mismos, cierto es que no conozco a ninguno de los artistas, algunos son copias promocionales (de estas que vienen con carátula de cartón y sin libreto) y seguro que son todos usados, pero ante esto voy a citar una de las máximas de los Eurotransmisores: "A caballo regalado, no le mires el dentado".
Rompo una lanza desde aquí en favor de la retribución en espécie. En tiempos difíciles (sobretodo con la subida de precios de los alimentos) debería ser obligatorio que las empresas proporcionaran ayuda monetaria a sus empleados peor pagados (esto es, el 99% de todo negocio) en sus necesidades básicas. Mis propuestas son (con más o menos sentido):
- Subvención de la comida.
- Cafetera de empresa (con suministros pagados por ésta).
- Ayudas con el transporte, en especial si el acceso a la empresa es "dificultoso".
- ¿Tu empresa te obliga a ir con traje? Que te ayude a pagarlo.
- Regalos de cumpleaños / navidad.
- Ayudas con el primer hijo.
- Descuentos en grandes superfícies.
Las propuestas son interminables. Y si no, pues flexibilidad de horario, para encontrar otro trabajo y llegar dignamente a fin de mes, que esto es una verguenza.
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