miércoles, 5 de noviembre de 2008

La crisis es una farsa

La crisis es una farsa.

Se trata de una conjura entre diferentes y poderosos estamentos de la empresa privada para ocultar sus fracasos y beneficiarse del temor de la plebe.

Los actores estelares de esta historia son los bancos y las constructoras, las constructoras han fracasado vendiendo cada vez más caros, pisos cada vez más pequeños y de peor calidad; los bancos han fracasado al conceder hipotecas para pisos tasados muy por encima de su valor real y a propietarios totalmente insolventes. Después está el resto de la empresa privada, el camello que siempre está dispuesto a saltarse la ley, el mafioso que siempre apoya cualquier fechoría, siempre lista para exprimir a los humildes trabajadores.

Una oscura noche de invierno, se reunieron tres representantes de estos tres bandos y acordaron un plan maestro, la CRISIS, para solucionar todos sus problemas. Crearon una cosa inexistente, para meter el terror en los hogares y justificar sus acciones, y con suerte, conseguir ayudas gubernamentales.

Enotnces, idearon la crisis y se quedaron ampliamente satisfechos, repanchingados en sus butacones de cuero negro, con un buen puro en la mano y una copa de coñac del caro en la otra.

Si instauramos la crisis, entonces podemos justificar las pérdidas y dejar de conceder hipotecas insolventes sin que nadie nos pida explicaciones, y con suerte, conseguir ayudas gubernamentales (dijo el representante bancario).

Si instauramos la crisis, entonces podemos justificar las bajadas de precio para poner los pisos en su lugar y dar motivo a despidos masivos, y con suerte, conseguir ayudas gubernamentales (dijo el representante de la construcción).

Si instauramos la crisis, entonces podemos justificar la congelación de sueldos y los despidos masivos también, y con suerte, conseguir ayudas gubernamentales (dijo el representante de la empresa privada).

Y así surgió la crisis en nuestro país. Un perfecto acto de terrorismo. Una estudiada acción de guerra psicológica.

1 comentario:

Anónimo dijo...

es triste pero tienes razón. Trabajo en una empresa que aun tiene beneficios, son unos grandes almacenes muy conocidos en todo el mundo. pues ahora tenemos la negociación pendiente, pues resulta que los jefes han recibido la consigna de infundir el miedo, nos estan reuniendo y comunicandonos que debido a la crisis puede mucha gente ir a la calle.
conclusion: por la cuenta que nos trae debemos estar contentos con tener trabajo, aunque en la negociacion salgamos perdiendo.
solo por estas cosas y nada mas se ha inventado la crisis, el miedo nos hara mas sumisos y desunidos frente a los poderosos.
HAN VUELTO A GANAR.